Desde hace unos años, el uso de auriculares ha entrado de forma importante en el mercado y, en consecuencia, en nuestra vida diaria. Existen, sin embargo, numerosos estudios sobre los efectos negativos de utilizarlos excesivamente, incluso, se ha determinado que pueden hacer daño a tu audición.
Una investigación australiana realizada por la Universidad Bond afirma que el uso moderado de estos dispositivos, generalmente, no causa ningún problema. Si, por el contrario, se utilizan durante mucho tiempo, son capaces de provocar una serie de trastornos relacionados principalmente con daños por ruido.
No hay duda, estos dispositivos se han convertido en compañeros fundamentales e indispensables, ayudándonos a afrontar llamadas telefónicas de cualquier tipo con total libertad. Pero, ¿genera daño a tu audición el uso de auriculares? En Audiotek nos volcaremos a descubrirlo, de la mano de nuestros especialistas en la materia.
Tipos de auriculares: ¿Cuáles afectan tus oídos?
Podemos decir que, respecto al uso de auriculares, existen dos tipos de personas: quienes aman los auriculares que se colocan sobre la oreja, sin insertarlos en el pabellón auricular, y aquellas que prefieren los auriculares in-ear porque se insertan directamente en la oreja.
Aparte de esta primera diferenciación en función de las preferencias de quienes los utilizan, a continuación detallamos los distintos tipos de auriculares y sus efectos en los odios:
- Auriculares abiertos
Tienen una superficie perforada que garantiza una buena dispersión del sonido y una menor presión sonora en el interior del oído.
Gracias a este mecanismo se puede aumentar el volumen de forma constante, teniendo siempre cuidado de no subirlo excesivamente para intentar contrarrestar los ruidos de fondo provenientes del ambiente.
- Auriculares cerrados
Proporcionan un buen aislamiento del ruido ambiental, gracias a los rodamientos con los que están fabricados. Es posible utilizarlos sin subir excesivamente el volumen, aliviando así el estrés auditivo provocado por el ruido fuerte.
- Auriculares intrauditivos
Garantizan un aislamiento importante del ruido externo, más que los auriculares cerrados porque se insertan directamente en la aurícula.
Según los expertos, siempre es mejor no utilizarlos a un volumen excesivo y durante un periodo de tiempo prolongado, para evitar daños por ruido. Una buena técnica es seguir la regla 60-60: escuchar música con auriculares de forma consecutiva durante no más de 60 minutos a un volumen que no supere el 60%.
Uso de auriculares y daño a tu audición: ¿cuál es la correlación?
Numerosas investigaciones han demostrado que el daño a tu audición asociado con el uso de auriculares reside en la frecuencia con la que se utilizan estos dispositivos, incluyendo la escucha de música a un volumen excesivo.
Esto se aplica a todos los grupos de edad: adultos y niños/as más o menos pequeños, ocupados/as en diferentes actividades, pero unidos por los mismos hábitos de usar estos dispositivos con muchísima frecuencia.
Los efectos de la exposición prolongada a ruidos elevados en nuestros oídos y sistema auditivo, conducen cada vez más a diagnósticos, casi a diario, de trauma acústico agudo y crónico causado por el estrés oxidativo en las células nerviosas.
Los afectados se quejan de diversos síntomas, entre ellos:
- Amortiguación del oído o sensación de presión en el oído y plenitud en su interior.
- Tinnitus , un ruido molesto en el oído similar a un silbido o zumbido;
- Disminución del nivel de audición.
- Dolor de oído, uno de los principales síntomas de un trastorno, junto con la dificultad de audición, especialmente en el caso de un traumatismo acústico agudo.
Los síntomas descritos pueden ser temporales, sin embargo, suelen volverse permanentes, especialmente si son causados por una exposición incorrecta y continua al ruido.
Hay, por tanto, muchos factores que contribuyen a que el uso de auriculares genere daño a tu audición. Hablamos del tiempo y el uso prolongado, diario y apremiante de auriculares, incluso, utilizar audífonos intrauditivos y similares suelen causar dolor de oído y daños reales y permanentes.
Buenos hábitos para adoptar mientras se escucha
Es bueno tener cuidado y evitar en la medida de lo posible el uso de auriculares de forma excesiva. Por supuesto, la puesta en práctica de buenos hábitos puede ayudar a establecer una rutina correcta para nuestro sistema auditivo. En Audiotek recomendamos:
- Variar el modo de escucha del sonido
No solo auriculares o audífonos, sino también parlantes portátiles, o directamente desde la computadora en modo de escucha remota natural.
- Moderar el volumen y la duración de la escucha
Nuestros expertos aconsejan utilizar el volumen hasta el 60% de la capacidad máxima, una estrategia definida como el umbral de escucha segura, durante no más de 60 minutos consecutivos.
Hay que destacar que los teléfonos inteligentes y otros dispositivos de audio tienen características especiales que pueden medir los niveles de exposición y concienciar a los/as usuarios/as del riesgo de pérdida auditiva desde el principio.
También pueden ayudar las aplicaciones disponibles en los teléfonos inteligentes que muestran los niveles de intensidad en decibeles, e indican si la exposición a este nivel de ruido presenta un riesgo.
Conclusiones
En los últimos años, el uso de auriculares ha aumentado exponencialmente. La, muchas veces, obligada permanencia en casa ha llevado a que se utilicen en momentos en los que antes no eran necesarios, como en reuniones de trabajo.
Esta práctica se extiende a menudo a lo largo del día, lo que lleva a su uso por la noche y en la cama, con una utilización continua y constante, hasta trascender en el abuso. Ahora, escuchar buena música o charlar por teléfono usando estos dispositivos no debe prohibirse del todo.
Evitar el uso de auriculares por miedo a problemas relacionados con el sistema auditivo no es una buena opción, como tampoco lo es no escuchar más música. La regla 60-60, sencilla y fácil de recordar, contribuye prevenir algún daño a tu audición: es decir, 60 minutos de uso, a un volumen igual al 60% del máximo del dispositivo.
Conviene recordar que cuanto más alto sea el volumen, más corto debe ser el tiempo de escucha, por lo que un breve descanso, quizás de 15 minutos, sólo puede ayudar a evitar la sobreexposición.